El uso temprano del NHF
El uso temprano del NHF está asociado con los mejores resultados fisiológicos y clínicos en comparación con la terapia de oxígeno estándar, incluidos1–6:
- mejores patrones de respiración y descarga más rápida de los músculos respiratorios;
- reducción significativa de la dificultad para respirar;
- una mejora rápida de la dificultad respiratoria;
- menor necesidad de intensificación de la terapia en lactantes con bronquiolitis.
El uso integrado del NHF
Integrar el uso de NHF en planta, en Urgencias y en las unidades de cuidados intensivos pediátricos (UCIP) se puede asociar con una mejor estandarización del cuidado.4–6 Cuando se usa de forma integral en el hospital, el NHF también puede contribuir a un cambio en la práctica de la asistencia respiratoria hacia estrategias menos invasivas, lo que puede hacer que se traten más pacientes en hospitales locales y centros para casos menos graves.4–6
Por consiguiente, el objetivo debería ser utilizar el NHF temprano y de forma integrada para reducir el riesgo de un escalado terapéutico.1–6
Establecer caudales para lactantes y niños
Los datos clínicos sostienen un enfoque de dosis de peso que sugieren caudales de aproximadamente 2 litros por kilogramo por minuto (L/kg/min) para lactantes entre 3,0 y 12,5 kilogramos.4,7–12
Sin embargo, no existen pruebas que respalden esta práctica en neonatos prematuros, niños mayores o adultos. Los protocolos clínicos publicados pueden arrojar algo de luz sobre el establecimiento de caudales en niños.7–12 El gráfico a continuación resume los hallazgos de las publicaciones médicas.
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