La CPAP es un tratamiento bien establecido que lleva en uso en la práctica clínica más de 40 años.1-3
La CPAP es una alternativa aceptada para la intubación habitual y la ventilación invasiva en neonatos prematuros con síndrome de dificultad respiratoria4,5 y es el método inicial preferido para administrar asistencia respiratoria no invasiva.6
¿Cómo funciona la terapia CPAP?
La terapia CPAP administra una mezcla de aire y oxígeno calentada y humidificada y genera una presión distendida continua en todo el ciclo respiratorio mediante una interfaz sellada.7,8
Existen diferentes métodos para administrar terapia CPAP, como la CPAP de burbujas, la CPAP de flujo variable y la CPAP derivada de un ventilador. La CPAP de burbujas es un modo simple y económico de administrar la CPAP en neonatos, incluidos los prematuros y aquellos con un bajo peso en el nacimiento.8,9
Existen múltiples beneficios a la hora de proporcionar una presión distendida continua, por ejemplo, el entablillado de las vías respiratorias superiores, mantener una expansión pulmonar, evitar el colapso alveolar espiratorio final y conservar el surfactante.7
Estos son los mecanismos y beneficios más importantes de la terapia CPAP: